Devocional Diario #12

advertising

Pues la palabra de Dios es viva y poderosa. Es más cortante que cualquier espada de dos filos; penetra entre el alma y el espíritu, entre la articulación y la médula del hueso. Deja al descubierto nuestros pensamientos y deseos más íntimos.

Hebreos 4:12

Dios Habla Hoy

¿Alguna vez le has pedido a Dios que te hable? Puede ser tentador pensar que podríamos tener más fe si Dios simplemente nos hablara. Si Dios hablara, sabríamos que es real y que existe.

Aunque, durante un tiempo, Dios habló a través de los profetas, nos ha estado hablando a través de Su Palabra. La Escritura es el medio de comunicación de Dios con su pueblo. Cada vez que abrimos la Palabra de Dios, estamos escuchando las palabras de Dios mismo. Por eso dice la Escritura que la Palabra de Dios es viva y eficaz. Es la forma principal en que Dios habla a su pueblo para guiar nuestros pensamientos y dirigir nuestros caminos. La Palabra de Dios nos vigoriza activamente y nos da sabiduría para vivir.

El autor de Hebreos también nos dice que la Palabra de Dios es como una espada que corta y divide nuestro ser más íntimo. Revela nuestro verdadero corazón. Expone nuestras emociones y pensamientos y luego nos guía hacia lo que es correcto.

La Palabra de Dios está llena de refrigerio para nuestro cansancio. Alienta a los que le siguen y escuchan su voz. La Palabra también está llena de la verdad de Dios que nos guía a vivir una vida recta. Moldea nuestros corazones y nuestras mentes para amar a Dios y amar a los que nos rodean.

Una de las mejores cosas que puedes hacer por tu vida es dedicarte a la Escritura a diario. Si raramente leemos la Palabra de Dios, raramente oiremos Su voz hablándonos. Cuanto más desarrollemos hábitos regulares de participación con Dios, más fácilmente oiremos y seguiremos Su guía.

Así que tómate un tiempo para considerar cómo puedes crear un hábito diario de involucrarte con la Palabra de Dios y pasar tiempo en oración. Dios quiere hablarte, pero debemos acudir a Él dispuestos a escucharle.

Oración

Dios, tu Palabra está cambiando activamente mi vida. Me desafía y me convence. Sana mi corazón y me anima a seguirte fielmente. Gracias por el don de tu Palabra. Hoy, te invito a que continúes usándola para transformarme en quien tú creaste que fuera. En el nombre de Jesús, amén.

Reflejar

¿Cómo actúa hoy la Palabra de Dios en tu vida?

0